En los últimos años, la cadena del maíz experimentó un crecimiento geométrico que la posiciona como la más importante de la agroindustria Argentina, al punto que en esta campaña 2021, la producción de maíz se estima en 48 millones de toneladas, superando a la de soja llegará a los 43,5 millones de toneladas.
Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el producto bruto agroindustrial de toda la cadena en 2021 asciende de 14.500 millones de dólares. En materia de exportación de maíz en grano, se estima una cifra cercana a los 8.000 millones de dólares.
Los números del Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca de la Nación también son elocuentes, ya que ubican el valor de la cosecha de maíz 2020-2021 en 12.228 millones de dólares. En cuanto a Córdoba, la producción estimada de 22,4 millones de toneladas supone rendimientos cercanos a los 87,1 qq/ha.
El economista David Miazzo, de la Fundación (FADA), señaló que “con un dólar promedio calculado, entre abril y septiembre, en USD 256 por tn, el valor de la producción en Córdoba es de 5.734 millones de dólares”.
Es importante tener en cuenta que la cosecha, en Córdoba, se lee mediante tres criterios distintos: Precios de exportación (maíz colocado en buques en el Puerto de Rosario), Precios internos (Mercado de Granos de Rosario) y precios de tranquera o valores ofrecidos si el maíz se retirara en el lote del productor. “Si queremos establecer el impacto de los precios del cereal en toda la economía, la referencia es la cotización internacional”, explica Juan Manuel Garzón, economista del IERAL.
La producción de maíz en Córdoba en 2007/2008 Valor FOB (es el precio de venta de los bienes embarcados a otros países) fue de 1.466.970 mil dólares. En el ciclo 2020/2021, la facturación alcanzó los 5.449.518 mil dólares lo que equivale a un incremento del 271%.
Escenario favorable
Argentina representa entre el 15 y el 20% del mercado mundial de exportaciones de maíz. El panorama desde el punto de vista de la demanda es muy favorable. En este esquema, China juega un papel central por su capacidad de tracción a nivel global.
“Los chinos aceleran las exportaciones como consecuencia de la fiebre porcina que impactó en su stock ganadero. La recuperación fue pensada con la creación de granjas intensivas al estilo occidental, demandando la compra a escala de granos para alimento en los rodeos”, comentó el analista de mercados y consultor privado, Jorge Dominguez.
Las estimaciones sobre el comportamiento del Gigante asiático en el mercado de importaciones de maíz coinciden en que representará una demanda sostenida. “China no tiene capacidad de extensión de su área sembrada que llega a 42 millones de hectáreas. Por otro lado, los rendimientos no superan los 6.500 kilogramos. En este marco, los números sobre precios a futuro son muy positivos.”, dijo el ex Subsecretario de Mercados, Jesús María Silveira.
La producción de maíz y sus derivados ha creado 730 mil puestos de trabajo en el sector maicero nacional, lo que representa el 6% del empleo registrado en el país. Observadores del sector consideran que el escenario seguirá siendo favorable y estiman que, para el 2027, la producción podría llegar a 200 millones de toneladas.
