“En localidades como Justiniano Posse, el cooperativismo suple las necesidades del Estado”

En 2009, tres cooperativas locales se unieron en COFRATER para proveer el hormigón necesario para obras esenciales para la localidad. Y la acción nunca se detuvo. Hablamos con Victor Barrera, gerente de la Cooperativa Eléctrica. Por Florencia Sosa

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Florencia Sosa Florencia Sosa 02-07-2022

Según el Relevamiento Social Comunitario realizado por la Fundación Colsecor en 2021, en Justiniano Posse existen 22 entidades sin fines de lucro que se dedican a 11 sectores de la economía y donde trabajan o colaboran 1.516 personas. Las organizaciones del tercer sector son claves para el desarrollo local ya que, en muchos casos brindan servicios públicos y esenciales, a la vez que generan mediante la economía social y solidaria puestos de trabajo significativos.

En junio de 2009, tres cooperativas de Justiniano Posse, la Cooperativa Eléctrica y de Obras y Servicios Públicos, la Cooperativa Agropecuaria Unión y la Cooperativa Agrícola Ganadera fundaron COFRATER S.A con el objetivo de vender hormigón elaborado y proveer bombeo de hormigón para diversas obras de infraestructura de índole privada y pública. Y fue el comienzo de una fecunda historia. Para conocer sobre el desarrollo y aporte de esta empresa en la localidad, Redacción Mayo conversó con Víctor Barrera, gerente de la Cooperativa Eléctrica y de Obras y Servicios Públicos de Justiniano Posse.

 

 

-¿Con qué objetivo se creó COFRATER?

-En primer lugar, el objetivo es el trabajo conjunto de cooperativas que es uno de los principios del cooperativismo que acá se cumple. Cuando van surgiendo oportunidades para realizar en conjunto entre las tres cooperativas, lo hacemos. Lo hemos hecho aprovechando una ley de diferimiento impositivo de la provincia de Córdoba con Ingresos Brutos; hemos construido un hotel en Villa General Belgrano que cumplió el propósito de generar esa desgravación impositiva para aprovechamiento. Después las cooperativas hemos vendido nuestras acciones pero sirvió y fue un trabajo en conjunto. Con COFRATER se dio algo similar con un doble objetivo: en primer lugar, generar en la localidad una fuente de trabajo que hoy ronda las casi 30 personas de manera directa; para localidades como la nuestra, una fuente de trabajo para 30 familias es un montón. A su vez, al tener una planta de hormigón elaborada en nuestra ciudad y con el trabajo de la Cooperativa Eléctrica de Obras y Servicios Públicos, que normalmente desarrolla obras públicas, significó el motor del avance en cuanto a la pavimentación del pueblo.

-¿Cuántas calles del pueblo fueron pavimentadas?

-Justiniano Posse tenía el 40% del pueblo pavimentado y desde hace más de 10 años, que ya se incorporó esta planta de hormigón, hemos realizado más de 120 cuadras y hemos pasado a tener más del 80%. Hay un beneficio para los frentistas de la localidad porque muchos tenían calles de tierra y hoy tienen calles de hormigón. Si bien nos hemos juntado y armamos esta empresa (la fundamos con una planta móvil y dos camiones Fiat modelo 68, hoy prácticamente estamos rondando los 20 camiones), siempre el rubro de la construcción estuvo mucho más afín a la Cooperativa Eléctrica de Obras y Servicios Públicos. Las otras dos cooperativas entendieron que el objetivo de generar una fuente de trabajo nueva en la localidad ya se había logrado y entonces una de las cooperativas, la Cooperativa Agrícola Ganadera, decidió desvincularse de la sociedad. No porque nos llevemos mal ni nada por el estilo; al contrario, ya estamos pensando en generar otros emprendimientos en conjunto que le sirvan a la comunidad.

-¿Cómo quedaron repartidas las acciones de COFRATER?

-La Cooperativa Agropecuaria Unión sigue participando con un porcentaje menor al que tenía, en su comienzo era un 33% de acciones para cada una. La Cooperativa Agrícola Ganadera vendió todas sus acciones a la Cooperativa Eléctrica de Obras y Servicios Públicos y la Cooperativa Agropecuaria Unión vendió una gran parte. En la actualidad, la Cooperativa Eléctrica es dueña de más del 90% de las acciones de COFRATER. En 2009 se fundó COFRATER y en enero de este 2022 se concretó la venta y compra de acciones.

-¿Con qué obra iniciaron COFRATER?

-La primera obra con la que nació COFRATER fue pavimentar todo el sector industrial norte de Justiniano Posse, que es donde está todo el cereal de una zona agropecuaria donde están las cooperativas agropecuarias. Allí tienen sus plantas de silo, el cereal viene del campo hacia esas plantas del silo en el sector industrial, ahí se realizan distintos procesos y desde ahí después se van al puerto de Rosario. Entonces, es un sector con un tránsito de muchísimos camiones por día que trabajan en algunas ocasiones las 24 horas del día. Por eso se hizo la obra de pavimentar toda la avenida industrial.

-¿En qué otras obras colaboró COFRATER?

-COFRATER siempre está dando una mano haciendo su política de economía social en diferentes instituciones del pueblo, es decir, colaborando con hormigón en los clubes, en los colegios. Lo que hoy las empresas llaman ?responsabilidad social?, el cooperativismo lo pregona desde que nació en cada lugar. Hoy la responsabilidad social está de moda porque las empresas privadas lo incorporan, lo comunican y está dentro de su marketing. El cooperativismo en localidades pequeñas como la nuestra es quien suple las necesidades del Estado. El dinero que se va en impuestos en localidades como la nuestra, si se van 100, no vuelven ni siquiera 10 para hacer obras. Entonces, es el cooperativismo el que cumple una función social importante, es el que termina haciendo las obras. A veces en conjunto con el Municipio, otras veces no.

-¿Cuál es el vínculo de COFRATER con el Municipio de Justiniano Posse?

-El vínculo ha sido muy bueno. Tanto nosotros como el Municipio entendemos que, en definitiva, los beneficiados por cada obra que se realiza son siempre los mismos: los habitantes de Justiniano Posse. Siempre hemos trabajado en conjunto, cada uno con lo que puede aportar. La cooperativa tiene una estructura que puede llegar a financiar este tipo de obras a los frentistas, para que lo puedan pagar en cuotas más pequeñas y tiene personal capacitado. El Municipio tiene también algunas herramientas pesadas que aporta para este tipo de obras. COFRATER tiene su logística con el hormigón elaborado y su capacidad instalada para proveer a toda la región. Entre los tres, COFRATER, la Municipalidad y la Cooperativa hacemos obras como pavimentación y cunetas. Trabajamos para que el pueblo sea beneficiado.

-¿Cuál fue la obra más importante que se hizo en la historia de Justiniano Posse?

-La obra de cloacas la hizo la cooperativa Eléctrica hace 22 años atrás. La cooperativa gastó todos sus ahorros, en el momento que estaba el corralito, para comprar los materiales para la obra de cloacas y no vino ni un centavo de afuera; ni uno de todos los impuestos que se van desde Justiniano Posse a la Provincia. En Justiniano Posse la obra de cloacas la hizo la gente, con el dinero de la gente que administra la cooperativa. Esa fue la obra más importante, porque el nivel de napas hace 22 años atrás estaba en 3 - 4 metros y ahí empezó a subir, y hoy tenemos las napas a 1 metro.

-¿Qué significan esos números?

-¿Qué quiero decir con esto? Que si la cooperativa junto al esfuerzo de la gente no hubiera construido la obra de cloacas, hoy se estarían hundiendo todas las casas de Posse, porque con ese nivel de napas y sin obras de cloacas, con todos los pozos negros debajo de cada casa, hoy se estarían rajando y partiendo todas las casas. Entonces, para mí, es la obra más importante que realizó esta institución y que a veces cuesta valorarla.

-¿Qué planificación o proyección de futuro tiene COFRATER?

-En la actualidad estamos terminando de capitalizarnos con las mejores herramientas. Cuando COFRATER comenzó atendíamos solamente Justiniano Posse y a los pueblos vecinos, y gracias al buen trabajo de la empresa hoy llegamos a casi 100 kilómetros a la redonda, a muchísimas localidades. Eso implica una tarea de logística que necesita de herramientas acordes, vehículos para atender esa demanda en tiempo y en forma, porque cuando la gente pide hormigón lo necesita ya. Entonces, hoy estamos terminando de capitalizarnos con algunas inversiones, tanto en la planta como en camiones. También tenemos una proyección de diversificar, es decir, no solamente COFRATER vende hormigón elaborado sino que realiza construcción de obras. Hemos realizado colegios, puentes, tenemos una especie de empresa constructora. Por eso, aparte de continuar con esos rubros, estamos analizando la posibilidad de incursionar en nuevos rubros relacionados a la construcción. La idea es ampliarnos, utilizar la capacidad instalada, generar más puestos de trabajo para la localidad. Estamos analizando varios proyectos para implementar quizás en el transcurso de este año o para 2023.

-¿Qué implica construir pensando en el medio ambiente?

-Siempre tenemos presente el medio ambiente. De hecho, otro de los emprendimientos que tiene la Cooperativa Eléctrica es Vatiova, una fábrica de luminarias led. Hoy vendemos en todo el país; nos faltaba solamente la provincia de Tierra del fuego y hace poquito pudimos concretar una venta allí. Hace 10 años atrás, la cooperativa tomó la decisión de formar una fábrica de luminarias led y la decisión surge a raíz de que teníamos que hacer un recambio en nuestro alumbrado público. Pensando en el medio ambiente, hace 10 años atrás, que no es lo que es hoy, tomamos el riesgo de hacer un recambio a led y, a su vez, el riesgo de poner una fábrica. Lo hicimos pensando en el recambio total de Justiniano Posse y de ahí en adelante, expandirnos a todo el país.

-¿En qué consisten los emprendimientos de la Cooperativa Eléctrica de Obras y Servicios Públicos?

-Desde hace unos 15 años, la Cooperativa Eléctrica generó otros emprendimientos que están por fuera de los servicios que presta, y que tienen en común traer dinero desde afuera de la localidad hacia adentro. Por ejemplo: COFRATER vende en toda la región y genera mano de obra local, y trae recursos desde afuera hacia adentro. Nuestra fábrica de luminarias vende en todo el país y esa facturación, que anteriormente no existía, hoy son casi 300 millones de facturación que se suman a los otros que casi 300 millones de COFRATER. En COFRATER un 80% de esos millones viene de fuera de la localidad, y en Vatiova casi un 100%. Viiene de afuera hacia adentro y la mano de obra es local. Entonces, eso hace que ingrese dinero a la cooperativa que después se utiliza para seguir construyendo calles y poder financiarlo en 10 años sin interés. Es decir, para que la gente pueda pagar su frente de pavimento.

-¿Cómo es y cuál es el valor del trabajo de la Cooperativa Eléctrica de Obras y Servicios Públicos? 

-Con cada acción que realiza el personal de la Cooperativa Eléctrica, o hacemos bien o hacemos mal. Si cometemos un error, se corta la luz, nos quedamos sin agua, se corta la televisión o internet: es menos calidad de vida para un domicilio. Si todo eso lo hacemos bien, tendremos más calidad de vida. En cualquier familia donde se corta la luz ya hay un enojo, algo que no pudieron hacer, algún trámite o estudio por internet, un examen que justo era a esa hora. La verdad, tenemos un plantel excelente. La mayoría de las veces, los cortes de energía vienen desde afuera, no lo manejamos nosotros y no hay mucho por hacer, pero sí, en la medida en que está en nuestra manos, lo resolvemos cuanto antes. Si lo podemos resolver en 10 minutos, lo hacemos y no es lo mismo que esperar una hora.

 

 

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Redacción Mayo

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