Los efectos del congelamiento de tarifas dispuestos por el gobierno nacional no fueron parejos para empresas y cooperativas.
Alejandro Barragán, jefe comercial de Celta, manifestó que la medida tuvo un impacto negativo en el desenvolvimiento de la entidad, ya que se ocupa de la distribución y no de la generación de la energía y cuando se decidió la medida no había aplicado actualizaciones suficientes como para cubrir los costos.
Barragán señaló también que, actualmente, la tarifa social se aplica al 20-23 por ciento de los usuarios residenciales, y aclaró que la cooperativa no define quiénes son beneficiarios sino que llega establecido en un padrón que giran las autoridades.